La eficiencia energética en Comunidades de Vecinos es una de las vías para reducir el impacto ambiental de los edificios residenciales; pero también una de las mejores formas de moderar la factura energética.
El uso eficiente de la energía, marca un consumo inferior a la media en la Comunidad de Propietarios, sin reducir por ello el desempeño. A la vez que se mantiene la calidad de vida o el confort en las viviendas y los espacios comunes y se contribuye al cuidado del medio ambiente y al ahorro económico.
Por estos motivos, apostar por la inversión en la rehabilitación de un edificio en busca de la eficiencia energética se convierte en una de las mejores decisiones que una Comunidad de Propietarios puede realizar.
No solo se verá reflejado en un gran ahorro de capital y en la disminución de la huella ecológica provocada por el inmueble, sino que además repercutirá en otras cuestiones como la revalorización de sus viviendas o en la mejora de la seguridad en el edificio.
¿Qué es la eficiencia energética?
Definimos eficiencia energética como el uso eficiente de la energía. La eficiencia energética busca proteger el medio ambiente mediante la reducción de la intensidad energética y habituando al usuario a consumir lo necesario y no más. Las emisiones de CO2 que enviamos a la atmósfera son cada vez mayores y, por ese motivo, la eficiencia energética se ha convertido en una forma de cuidar al planeta ya que, no solo está en usar electrodomésticos que consuman menos, sino en que seamos nosotros quienes consumamos menos .
¿Qué medidas puedo adoptar para ahorrar energía en una Comunidad de Propietarios?
Para lograr optimizar considerablemente el consumo de energía en una comunidad, será recomendable encargar a un especialista una auditoría energética, mediante la cual se realizará un estudio completo del edificio y de sus instalaciones para poder conocer objetivamente la energía consumida y saber qué medidas se pueden implantar para lograr un óptimo ahorro energético, como pueden ser:
- Sectorizar la iluminación en las zonas comunes como el portal, los rellanos y el garaje, instalar temporizadores y sustituir las lámparas convencionales por iluminación LED. Todas estas actuaciones pueden lograr ahorros de hasta el 80% del consumo.
- La instalación de contadores individuales para medir los consumos energéticos de calefacción y agua puede llegar a suponer ahorros del 30%, ya que de esta forma los vecinos tienen más cuidado en el despilfarro energético. Actualmente, para las nuevas construcciones ya es obligatorio la instalación de este tipo de contadores individuales.
- Renovar la antigua caldera central de gasóleo o carbón por una de condensación, de baja temperatura con gas natural o de biomasa, se pueden alcanzar ahorros de un 40%.
- Gran parte del calor que produce la calefacción se suele escapar por la fachada, rehabilitarla añadiéndole aislamiento con planchas o paneles por el exterior, puede suponer un ahorro del 50% en el gasto energético del edificio. Otro sistema idóneo es crear una cámara de aire que actúe como acumulador de calor, evitando así fugas al exterior.
- Sustituir los antiguos ascensores por unos más eficientes o colocar un mecanismo de maniobra selectiva para evitar los viajes vacíos y detectores de presencia en la cabina para que esté iluminada únicamente cuando esté en uso.
- La colocación de placas fotovoltaicas o termo-solares en la azotea o cubierta del edificio puede cubrir la demanda de entre el 50% y el 70% del agua caliente del edificio. Además, la energía sobrante puede ser destinada a la iluminación, lo que conllevará un ahorro extra.
Por otra parte, si se llevan a cabo este tipo de medidas antes de solicitar un certificado energético conjunto para una Comunidad de Propietarios, se logrará obtener una mejor calificación y un beneficio para todos los propietarios
¿Qué es un certificado energético?
Un certificado energético es un documento oficial redactado por un técnico competente (arquitecto, arquitecto técnico, ingeniero, ingeniero técnico) que incluye información objetiva sobre las características energéticas de un inmueble, y que refleja el gasto energético de la construcción como son los consumos de agua, electricidad o gas.
Su sistema de evaluación establece siete niveles de certificados en función de las emisiones de dióxido de carbono y del consumo de energía del edificio. Conforme a la normativa nacional, se parte de la G (la menos eficiente) a la A (la más eficiente).
Conviene subrayar que es una exigencia derivada de la Directiva 2002/91/CE, por la que se aprueba el procedimiento básico para la certificación de eficiencia energética de edificios, y que según el Real Decreto 235/2013 es obligatoria la emisión de estos certificados de eficiencia energética para la compraventa y alquiler de viviendas y edificios, tanto nuevos como ya construidos.
Aunque en el caso de las Comunidades de Propietarios no están obligadas a poseer un certificado de eficiencia energética general para todo el edificio y sus viviendas, es altamente recomendable su realización, ya que formará parte del Informe de Evaluación del Edificio (IEE), que sustituye al antiguo ITE (Informe Técnico del Edificio).
Debemos tener en cuenta que un certificado conjunto para la comunidad tiene un ahorro estimado de entre 8 y 10 veces el coste de ser realizado independientemente por cada vecino, y las tasas de registro en la comunidad autónoma también son mucho más económicas.
¿Hay programas de ayuda disponibles para la rehabilitación energética de Comunidades de Propietarios?
El programa PREE, aprobado por el Consejo de Ministros el 4 de agosto del 2020 mediante el Real Decreto 737/2020, que tiene como objetivo dar un impulso a la sostenibilidad de la edificación existente en nuestro país mediante una dotación presupuestaria de 300 millones de euros.
Actuaciones en Comunidades de Propietarios como la mejora de la envolvente, la sustitución de sistemas centrales de calefacción y agua caliente por otros energéticamente más eficientes, la instalación de sistemas de contaje de energía, la reforma de la iluminación de las zonas comunes o el aprovechamiento de la energía solar contarán con la concesión directa de paquetes de ayudas y subvenciones.